Amed Camilo López, joven luthier cubano del centro de Cuba, es un dedicado fabricante de instrumentos musicales. Su trabajo abarca gran parte de los instrumentos de la familia de cuerda pulsada. A través de su labor ha tratado de honrar la memoria histórica y cultural de la nación cubana contribuyendo al rescate de la tradición de la luthería en esta pequeña isla del centro de las Américas.

Sus inicios en la profesión fueron en 2006 con la construcción de una guitarra, gracias a la fe y el apoyo de un reconocido luthier de la provincia de Villa Clara y del país: Carlos Rodríguez Martín (El Grillo). A consideración del maestro las dotes artísticas de su discípulo eran más que suficientes para emprender la tarea de elaborar instrumentos musicales de manera artesanal, pese a que la formación del mismo estaba muy alejada de tales artes: Especialista de Motor y Fuselaje de Aviación en aeronaves de combate rusas (específicamente MIG 23)...

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“No me confío ni pienso mucho en los trabajos felices porque cada instrumento es una pieza única. Cada uno tiene su propia personalidad. Pero a todos les pongo el corazón y los amo desde que van naciendo como auténticos hijos con todo el sacrificio que implican. Tal como lo hiciera mi abuelo paterno, que no veía la adversidad, sino las esencias, con su capacidad de asombro y de nunca rendirse.

Así, la pasión del abuelo, la minuciosidad, disciplina y tenacidad de la aviación y de la vida militar, la sensibilidad del arte, la fidelidad de los amigos y el apoyo de mi esposa son a grandes rasgos los ingredientes que componen mi fórmula de trabajo y permiten entregarme a este oficio tan complejo y a la vez hermoso con energías renovadas cada día.”

Amed Camilo López